NO creemos en nosotros ni en nuestras capacidades y recursos. Tampoco recibimos reconocimiento por lo que hacemos. Nos enseñan a cumplir nuestro deber y reprimir nuestros sentimientos, a dejarnos vencer y dominar por el miedo. Nos sentimos cayendo lentamente por un hoyo profundo,¿ hasta dónde? ¿Hasta cuándo? depende de dónde pongamos el límite.
Nos toca encontrar nuestro equilibrio, sanar nuestras heridas, cuestionar nuestras creencias, soltar todo lo que nos condiciona y encarcela nuestra libertad para conseguir una vida justa, llena de paz y tranquilidad.
Aprendamos a escucharnos, conocer nuestras necesidades, lo que sentimos, gestionar respetando nuestros ritmos,
aceptando nuestra forma y descubriendo el ser humano que somos, adulto, que toma las decisiones que quiere sin temor a equivocarse, valiente dispuesto a aprender de las consecuencias de lo que dispone.
Todo aprendizaje necesita un tiempo, más o menos largo. El secreto es perseverar y practicar, e iremos viendo como conseguimos nuestros objetivos y cómo se cumplen nuestros sueños. Conocer nuestra propia identidad, nuestra idiosincracia única y ser fiel a ella nos hará llegar al máximo de nuestro potencial.
Estamos en un momento importante. Estamos viviendo una realidad que alimenta nuestro miedo y desarrolla pequeños traumas psicológicos, importantes, que nos atrapan con ese miedo: al contagio, a la nueva normalidad, a la situación económica, peligros que nos acechan… o podemos buscar la ayuda de expertos que nos acompañen a descubrir y comprender nuestra realidad, como enfrentarla para resolverla de manera satisfactoria.
Cada nueva información nos confunde más. ¿En quién confiar? ¿ En expertos que hablan desde sus palacios de oro o en nosotros que experimentamos metidos en el lodo? La verdad y el conocimiento se obtienen con
la experiencia y escuchando lo que aprenden los expertos que investigan,
como hipótesis a probar para volver a tu yo y ponerla en práctica, a tu ritmo, con tus capacidades para crear la vida que quieres y realizar tus sueños. Elsa Barber